NO ES HORA DE MORIR

Con mi cuerpo tembloso despierto, hora 3:45 am solo han pasado 40 minutos desde que llegué a mi casa... creo, y a mi me parece toda una eternidad; mi madre esta en su habitación, tal vez durmiendo cómodamente.
Bajo a la cocina, encuentro el cuchillo, pruebo si tiene filo y... que tonto, el efecto de la marihuana o el excesivo efecto del aguardiente no permite que tenga tanto control de mí como el que necesito en estos momentos, me alcanzo a cortar un poco, se ve sangre en el piso y creo que todo va a ser traumático cuando hagan el levantamiento; subo a la alcoba principal, ahí esta ella, llena de dolor, de tristeza, llena de rencor y dormida.
si lo hago ahora mismo se que le dolerá un poco, pero luego, poco a poco el dolor le irá desapareciendo yo le quitaré un peso de encima a ésta vieja que tanto ha sufrido por mi culpa, me acerco sigilosamente con el cuchillo en mi mano y algunas gotas de sangre mojan su almohada, saco una nota de mi bolsillo y la dejo junto a ella, espero que lo entiendan todos cuando la lean y no me juzgen sin razón, pero si supiera que todo vale la pena, que hay una esperanza no tomaría ésta desición tan dificil... si... algunos dicen que suicidarse es de cobardes, pero es que ellos no han pasado por donde yo lo he hecho... que se pongan en mis zapatos!!

salgo de su cuarto, el baño sera un mejor escenario... enciendo la luz, pero no funciona, lo intento 3 veces y exclamo, Dios mio y ¿ahora que?... 

se acelera mi corazón, siento que alguien me mira, cierro la puerta del baño y todo está oscuro, muy oscuro... luego una luz, una luz fuerte, solo veo un semblante, de un tipo sonriendo que dice no es hora de morir, es hora de vivir, pone su mano en mi frente, sus dedos cubren mis ojos, le veo en la palma de su mano una herida profunda, me da un sueño tremendo, todo me da vueltas, todo pasa muy rápido.

despierto nuevamente, miro el reloj, hora 9;00 am, me encuentro en mi habitación, estoy muy confundido, acto seguido entra mi madre y le digo mientras la abrazo todo ha sido un terrible sueño, ella sonriendo me hala la oreja y me dice el desayuno esta servido, y gracias por la nota que dejaste junto a mi almohada, me agarro fuerte la cabeza y mientras tiro mis cabellos ella me muestra el mismo pedazo de papel escrito con mi propia letra una frase que retumba en mi corazón " no es hora de morir, es hora de vivir" 


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